Hablemos de la felicidad
Hablemos de
la felicidad.
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Soy Ramón, nombre que mi madre eligió a la
memoria de un tío quien perdió la vida asesinado en su juventud, pero también
soy Ramón, como San Ramón nonato, el santo patrono de las mujeres que quieren
tener hijos y no pueden, de las embarazadas, de los partos difíciles, patrono
de la vida en general; del recuerdo de mi tío asesinado y de las causas de San
Ramón busco honrar el derecho a la vida, a la vida plena, que no es otra cosa
que la felicidad.
Hace 11 años viví la cercanía con la muerte, 11
de enero, 5;30 de la tarde fui asaltado y acuchillado en tres partes del
cuerpo, tres puñaladas bien dadas, corazón, pulmón y cuello, arriba le tienen
una tarea, por eso no se lo llevó, me dijo el doctor, ¿qué tarea me tendría él
de arriba, como dijo el galeno? salí del hospital con la inquietud de buscarlo
y preguntarle.
En el proceso de recuperación, leyendo y
reflexionando descubrí que conocer, amar y respetar a uno mismo, a los demás y
a dios es hacer la felicidad de todo género humano, reafirme lo que venía a
diciendo, no sé qué tarea me tenga dios, pero mientras tanto hablemos de la
felicidad.
Hablemos de felicidad, que la primera obligación
de todo ser humano es ser feliz y la segunda es hacer feliz a los demás, como
dijo Mario Moreno Cantinflas.
La felicidad es de cuatro tipos, es placer
sensorial, gusto, tacto, visión; es emociones positivas, alegría, orgullo,
gratitud, esperanza, amor… es propósito, experiencia flujo, esa que cuando las
realizas pierdes la noción del tiempo, pero es también significado, la razón
por la que se hacen las cosas, sensación profunda serenidad y realización, que
se logran a nivel espiritual.
La felicidad es la suma de momentos placenteros
menos momentos desagradables, sentimientos positivos generados en la parte
izquierda del cerebro, es la sensación de bienestar, es un sentimiento de
satisfacción.
Técnicamente es la diferencia en los niveles de
actividad eléctrica entre el lado derecho e izquierdo de la corteza prefrontal
(Richard Davidson).
Y muy prácticamente, es la adecuada relación con
lo que nos rodea.
Es muy importante conceptualizar la felicidad,
porque de lo contrario las personas confunde, y luego la buscan en fuentes
equivocadas.
Ahora bien ¿por qué es importante la felicidad?
Es importante porque es un tema de vida o
muerte, de desarrollo o de atraso, las personas infelices son personas que
tiene miedo, miedo a perder dinero, a no demostrar poder o no tener dinero para
comprar lo que la sociedad le impone como norma, cuando las personas no pueden
lograr lo que se supone deben mostrar, surge la crisis de poder y con la crisis
de poder se manifiestan una de dos cosas, la violencia para demostrar el poder,
o bien la derrota, la primera manifestación, la violencia lleva a la principal
causa de infelicidad en México, la violencia doméstica, y con ello la violencia
de género y los feminicidios, donde Colima ocupa los primeros lugares.
La segunda reacción a la crisis de poder es la
derrota, con ella viene la tristeza, la depresión y el suicidio, por cierto,
este problema ha crecido en más del 350% en la población menor a 15 años, en
Colima se suicida una persona por semana en promedio. Violencia y violencia a
uno mismo se alimentan mutuamente, padres infelices golean a sus parejas, ellas
golpean a sus hijos y ellos hacen bullying en la escuela generando también
depresión y suicidios.
¿Verdad que sí es importante hablar de
felicidad? ¿Verdad que como filósofos tienen mucho trabajo?
Pero aún hay más razones para ocuparnos de la
felicidad del género humano.
La importancia de la felicidad de los niños.
La infelicidad es estrés de poder, y muchos
niños tienen estrés desde antes de nacer, el de las madres o cuidadoras, con el
estrés llega el cortisol al cerebro y mata las dendritas, y sin dendritas no
hay sinapsis, sin sinapsis no hay aprendizaje, y por consiguiente se pone en
riesgo el desarrollo personal y el desarrollo económico del país.
La infelicidad, cortisol en el cerebro, afecta
el aprendizaje, pero también afecta la capacidad de socialización y deteriora el
sistema inmunológico de los niños, por lo tanto, estos niños nunca serán
libres, porque es el conocimiento el camino a la libertad, por el contrario,
permanecerán en la oscuridad permanecen en la esclavitud de la ignorancia, en
la esclavitud de la enfermedad y como decía Aristóteles aislados como brutos.
Tres cosas tiene el niño feliz que no tiene el
niño poco feliz, 1, siempre contaron con el apoyo de sus padres, 2.- Siempre se
sintieron aceptados y 3 siempre se sintió querido por sus padres.
¿Aquí me pregunto cómo se sienten al respecto
los niños huérfanos? que seguramente hay muchos en Colima.
¿Qué estamos haciendo como sociedad en general en
materia de crianza y de atención a los niños huérfanos?
¿Estamos procurando una crianza amorosa, para
tener niños con un coeficiente intelectual alto, sociables y sanos? ¿o los
estamos siendo negligentes y los abandonamos a su suerte sabiendo que van a
tener un bajo coeficiente intelectual, un sistema inmunológico débil y un
comportamiento antisocial?
¿Como estamos en Colima en infelicidad de los
niños? según la consulta del INE en 2019, Primer lugar en violencia, primer
lugar en discriminación.
Por lo tanto, es una muestra de una inadecuada
relación de los padres con sus hijos, una relación que carece de amor materno y
de amor propio, que genera niños con baja autoestima, con baja libertad,
esclavizados en las tinieblas de la ignorancia.
Jóvenes filósofos ¿Qué estamos haciendo por la
felicidad, por la felicidad de los niños, sobre todo de los niños huérfanos?
Poco o nada, no es tema de la agenda pública ni
social, como hombres libres que buscan la libertad, hagan algo por nuestros
semejantes más indefensos, hagamos algo por nosotros y por nuestras familias,
que es por el bien de Colima.
Gracias por su atención.
Villa de Álvarez, Colima a 22 de “febrero” de “2020”
Ramón
García Contreras
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